Una agencia de publicidad integró un agente de inteligencia artificial de voz para gestionar las consultas de los clientes, la recepción de proyectos y las actualizaciones rutinarias de las campañas.
El 30% de las llamadas entrantes no recibieron respuesta cuando el personal estaba ocupado con campañas activas.
Los administradores de cuentas dedicaron el 40% de su tiempo a responder consultas repetitivas sobre actualizaciones de campañas y métricas de rendimiento de anuncios.
Los clientes frustrados a veces llevaron sus negocios a otra parte debido a la falta de una comunicación rápida.
Las llamadas perdidas se redujeron al 2%, gracias al soporte automatizado 24/7.
Las consultas rutinarias sobre el progreso se resolvieron en 1 o 2 minutos, lo que liberó a los gerentes de cuentas para que se concentraran en la estrategia y el trabajo creativo.
Los índices de satisfacción del cliente aumentaron un 17%, como se refleja en las encuestas posteriores a la llamada.
El agente de inteligencia artificial de voz saluda a las personas que llaman e identifica si necesitan una cotización de proyecto, una actualización sobre una campaña existente o información general.
Entrega informes de estado automatizados sobre las métricas de campaña (por ejemplo, impresiones, tasas de clics) extrayendo datos de las plataformas de análisis de la agencia.
Si un cliente necesita aportes estratégicos o debates creativos, el agente de IA lo dirige a un gerente de cuenta apropiado.